Llega un miércoles más, y con él un artículo de la saga "Por el amor de Diós" (ver Analiza tus visitas, por el amor de Dios y Haz copias de seguridad de tu web, por el amor de Dios). Hoy hablaremos del análisis de algo más importante que las visitas. ¡De las conversiones!
Capturando los datos
Definamos primero conversión: Es la consecución de un objetivo marcado. Por ejemplo, en un ecommerce las conversiones son ventas. Alguien llega y compra. Bien. Conseguido. Pero no todo el mundo tiene un eCommerce. La mayoría de mis clientes sólo tiene una web corporativa. En tal caso, lo que debemos considerar conversiones, son los contactos comerciales, potenciales clientes.
En el caso de los contactos comerciales como conversión, tenemos un problemilla. Si el contacto se realiza a través del formulario que hay en la web, podemos capturar toda la información sin problemas (de dónde ha venido la visita, qué ha buscado en Google, a que hora, en que región geografica...). Pero si esa persona llama por teléfono, ya hemos jodido la marrana. Porque nunca vamos a poder conocer todos sus datos, a no ser que le apliquemos el tercer grado durante la llamada (cosa que sería un poco violenta para una primera toma de contacto). Y aunque lleguemos a saberlo, no lo tendremos en nuestros informes de Analytics, ni podremos hacer estudios con datos agregados. O sea que mal. Lo mismo pasa si nos manda un mail directo, una carta por correo o señales de humo. ¡Se pierde la información!
Así pues, yo siempre recomiendo utilizar el formulario como único método de contacto en la web. Nada de mostrar un número de teléfono ni un email. Lo mejor es un formulario, pues nos permite capturar todos los datos.
Datos capturados (D.A.T.O.)
Todo. Lo capturamos todo. Cada vez que alguien nos manda un formulario de contacto podemos capturar todo lo que nos interese. Pero bueno, tampoco es cuestión de perder el tiempo analizando cosas que no nos interesan demasiado. Veamos pues las cuatro más importantes:
- Demografía: Desde dónde se conecta el usuario, y que idioma utiliza
- Agenda: A que hora se ha conectado, y en que día de la semana
- Tecnología: Desde que dispositivo se conecta (ordenador, tablet, teléfono)
- Origen: Como ha llegado a nosotros (Google, Facebook, Twitter...)
La denominación D.A.T.O. me la he inventado yo. Estoy muy orgulloso de ella, porque la utilizo en todos mis informes, y a la vez no mucho, porque la "A" de agenda está un poco pillada. ¿Pero qué más quieres? No soy experto en acrónimos. ¡Lo importante es que funciona!
Veamos un ejemplo... supongamos que una web que se dedica a los churros a domicilio a nivel nacional, ha tenido 10.000 visitas en un cierto período de tiempo. Y de estas, únicamente 1000 han hecho una compra. Nos ponemos a analizar esas 10 visitas y nos damos cuenta que 700 de ellas tienen como demografía "Valencia". Quizás estemos descubriendo que a los valencianos, aparte de la fallas también les gustan los churros. Debemos analizarlo. Quizás pusimos ahí un anuncio en una revista, o quizás una emisora de radio local habló de nuestra web. Tenemos que ver si se trata de una cosa puntual, o si se mantiene en el tiempo.
Seguimos analizando y vemos que 800 de ellas tienen una agenda de "Sábados por la mañana". Ahora estamos deduciendo que a la gente le viene de gusto comer churros los sábados por la mañana. Interesante. Quizás es porque da palo hacer el desayuno, quizás es como un premio de fin de semana... analicemos el porqué.
Vamos más allá y vemos que 600 de ellas tienen una una tecnología "Movil". O sea que se conectan desde sus teléfonos a nuestra web para hacer el pedido de patatas fritas. Como sabemos que además lo hacen par la mañana, podemos atrevernos a pensar que quizás están haciendo el pedido desde la cama, pues el sábado la gente suele levantarse más tarde.
Finalmente, 900 de ellas un origen de "Google" con la palabra clave "churros a domicilio". Esto es evidente, y no hace falta pensar mucho, ¿verdad? Si alguien quiere churros a domicilio, no hay demasiadas alternativas para buscar en Google.
¡Tomar decisiones!
Bueno, pues ya tenemos todos los datos. Eso era lo fácil. Ahora lo divertidamente difícil. Tomar decisiones.
Empecemos por Valencia. Si detectamos una zona geográfica que tiene predisposición a comprar nuestro producto, ¡aprovechemos! Hagamos una campaña en esa zona. Lo que sea: Una campaña de AdWords, un anuncio en una revista local, banners en alguna web centrada en esa ubicación, etc. No podemos dejar pasar ese hecho, pues podemos estar perdiendo muchas ventas.
Luego tenemos los sábados por la mañana. Hemos descubierto que la gente quiere un premio por haber trabajado duro de lunes a viernes, y el sábado por la mañana no quieren ni levantarse de la cama para hacer el desayuno. Potenciemos eso. Pongamos un anuncio en la radio local, para que hagan saber a todo el mundo que alguien les puede hacer llegar esos churros. Captemos a todos aquellos usuarios que no habían pensado en esa opción, pero que al oírlo no pueden resistirse.
Sigamos con el móvil. Claro... si se conectan des del móvil estando en la cama, necesitarán una web completamente adaptada para dispositivos móviles. Que la experiencia de navegación sea óptima. Si hemos conseguido que alguien se conecte a nuestra web porque le apetecen nuestros churros, no podemos permitirnos el lujo de perder una venta porque la web se ve como el culo desde un iPhone. ¡Optimiza tu web para móvil! O incluso... haz una App!!
Finalmente, tema Google. Si el 90% de tus ventas son de gente que ha buscado "churros a domicilio", tienes que arrasar en Google con esa palabra. Deber aparecer en todas partes de la página de resultados de Google: En SEO, en AdWords, en Google Maps, en Google Shopping... si apareces dos o tres veces, mejor!
Por cierto, si eres un valenciano que compra churros a domicilio los sábados por la mañana con el móvil desde la cama, debes estar flipando.
Resumiendo...
El proceso esta claro, verdad? Primero, establecer conversiones. Segundo, capturar datos. Tercero, tomar decisiones. Tres pasos indispensables si valoras aunque sea un poco tu estrategia de marketing en Internet. ¿Tiene sentido, verdad?
Como siempre, si no sabes como hacer todo eso, o te falta tiempo, o no te da la gana, pero quieres que alguien lo haga por ti, ya sabes dónde encontrarme.