Agustín encontró en Internet, allá por 2004, la salida perfecta para la inquietud de emprendedor que siempre le había acompañado.
Conoció por casualidad al CEO y fundador de una importante empresa brasileña de email marketing y no dudó en asociarse con él.
A la hora de llevar a cabo sus proyectos, su mujer ha sido siempre un gran apoyo para él. Tuvo que competir directamente con empresas similares de su sector, pero continuó buscando hasta encontrar a sus clientes ideales.
Sus dos puntos fuertes son la atención al cliente y la rapidez de respuesta. En Pipz Automation enseñan a los usuarios cómo hacer un buen email marketing, enseñándoles a segmentar y sacar el máximo rendimiento.
Para darse a conocer, además de usar su propia herramienta (obviamente), también trabajan el inbound marketing , blogging y redes sociales. Algo que ha aprendido bien desde el principio es la importancia de no parar: aprender y evolucionar constantemente.